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viernes, 24 de abril de 2015

El Día de los amigos del Bobo

   


   Para mí es hoy, cuando piano piano mi Bobo empieza a ganar el corazón de quienes me leen, el Día de ellos. Y quiero HOY dejar huella  aquí  si quiera de algún fragmento suyo, de los más recientes, pidiendo de antemano perdón –que nadie me lo tome a mal, por favor- a quienes habiéndose afanado también en comunicarme su deleite con mi libro aquí no se vean, por haberlos yo extraviado, (y si me lo vuelven a mandar, con sumo gusto aquí lo pongo), pues no es uno maniático coleccionista de alabanzas, de veras. Que sepa cada uno de quienes me solicitaron y me solicitan mi Bobo (que podrá ser algo bobo, pero jamás un simple, y que son su ínfulas de las buenas, de esas que buscan a través de las ilusiones re-encantar el mundo) que jamás olvidaré su gesto. (Y mi especial gratitud a Marci O, a Estrella P, a César Luis S, a Julia C , a Maday , y a María José V, por lo que ellos y yo sabemos). Va.
  

Inmaculada me escribió:
     “Gracias por la dedicatoria y por lo mucho que nos reímos contigo. Le leo algunos párrafos a mi marido y nos tronchamos”.
    
   Marie me escribió:
     “Cher Jose Antonio, t´est un poéte. ¡Es verdad que tu libro hay que leerlo a la tuya manera…es decir… parsimoniasamente… doucemente… amorosamente. Porque tus historias cortas son pequeñas vidas tintadas de poesía, de una nostalgia impregnada de recuerdos y de humor, y de una cierta ternura.
        Pilar me escribió:
 “Comencé ayer a leer el libro. Me encanta. Buenos personajes, estupendas descripciones… lo estoy disfrutando. Eres un buen escritor!
     
   Maoka me escribió:
     “Estoy leyendo tu libro, me encanta y me estoy riendo mucho, tienes sentido del humor. Le presté el libro a mi madre, le está gustando mucho. Te ruego que sigas escribiendo, un abrazo”
      
   Gallego me escribió:
       “Buenas, voy por la mitad de tu genialidad. No entiendo cómo puede ser que pases desapercibido con tanto talento…
     
   Jesusa me escribió:
   “He empezado esta tarde tu libro. ¡Incapaz de soltarlo! Me da penita de Armando, qué mala suerte tiene con las mujeres, jajajajá…  Gracias por tan grata lectura.”
   Mónica:
     “Un libro muy entretenido y con grandes dosis de humor. Muy recomendable”.
     Olga me escribió:
     “Felicidades, Jose. He sonreído al leerte, te he reconocido en tus maneras ya por el blog familiares. Mil gracias”.
     
   Magda me escribió:
     Armando es una especie de niño grande, así lo he visto yo todo el tiempo al menos, sobre todo porque dentro de sus cuarenta años y de  la devastación emocional que le acompaña tras el abandono de su mujer siempre parece acompañarle un halo de ilusión y esperanza, como un niño, conforme leía casi parecía que podía ver sus ojos brillantes, esperanzados ante algo nuevo, y solo podía sonreír e incluso emocionarme en algunos momentos ante el arrebato de ternura, defensa y protección que Armando despertaba en mí.
   Manolo López Bárcena así me escribió:
   “Es una novela intimista y llena de lirismo, rica de bellas metáforas. Su lectura es trepidante con un humor sutil y erudito no exento de enjundia. Una narración sobre la cotidianidad de la vida de personajes con los que nos podemos encontrar todos los días. Descriptiva magistral, no de cosas y paisajes, sino de sentimientos abordados con una elegante sensualidad y frescura. En definitiva una obra muy amena para pasar un rato estupendo”.
   Mammen me escribió:
“Hace un par de veranos, M, me regaló tu libro por mi santo; me lo pasé genial leyéndolo y ésta Semana Santa he vuelto a releerlo….La cuestión, que me caes muy bien y que me gustaría que siguieses escribiendo.
   Gema Cepeda me escribió:
“Sorprendentemente me enganchó. Emocionada con su personaje y ansiosa por el desenlace me lo devoré. Es tan divertido el libro, tan suelto, tan fresco que a medida que me voy sumergiendo en él… Si te pilla en un día de “esos tontos” hasta te puede acabar arrancando una lagrimillas o un montón de sonrisas. Me ha dejado un sabor de boca delicioso”.
  Y  Jose Luis Rodriguez me escribió:
“Ya he empezado a reírme en el cercanías con el pobre bobo. Mira que teniendo a Rita-Mercedes en la cama ponerse nervioso y empezar a hablar de fracasos. Pobre hombre. He llegado a Aravaca sin enterarme y casi me paso de estación”.
   Y Chela:
Al final, las últimas páginas, me hicieron reír a carcajadas pero el cariño que le tomé a Armando, tornó mi risa en silencio y reflexión, invadiéndome un sentimiento de ternura y afecto solidario.
     Y Euclides:
“… tu libro es una pasada, está bien escrito, bien trabajado, te ríes un montón con él y vale la pena
      Y  Mónica:
“un libro muy entretenido y con grandes dosis de humor. Muy recomendable”
      Y  Blanca:
Tal vez Marek y Kowalski sí eran virtuosos del violín. Lo que no cabe duda alguna es que eres un gran escritor”
      Y Pepe B:
Solo unas lineas para decirte que tu libro me ha encantado de principio a fin.  Tu prosa es de las mejores que he leído en castellano en mucho tiempo, y las aventuras/desventuras del protagonista, tan humano, tan imperfecto y por ello tan real, son realmente arrebatadoras. 
      Y  Rocío:
-¿Te cuento lo que me parece un poco leerte? Me da un poco de vergüenza decírtelo… El mundo es más bonito visto desde tus ojos, desde tus escritos.
  
   -Ese fragmento de la mano en el cine… Nunca imaginé que podía ser tan bonito, tan romántico y tan erótico el que te acariciaran una mano. Gracias por ello.

Muchas gracias, mon amis.


2 comentarios:

Caba dijo...

Don Armando es un ser genial, en el que muchos nos vemos identificados. Todo lo que hemos leído y estudiado se diluye en la noche ante una chica guapa y un guaperas de barra.

Yo lo he leído demasiado rápido, 3 días me duró, pero creo que darle una segunda vuelta haga que me vuelva a reír con los detalles, una vez que le he cogido el punto al personaje.

Gracias José Antonio por la dedicatoria y el libro, he disfrutado mucho leyéndolo.

José Antonio del Pozo dijo...

Muchas gracias, Caba, es usted muy amable. Un fuerte abrazo